Me gusta oír al Carlitos Herrera
en su franja horaria de diez a once de la mañana en ese trocito de su programa
que él llama la opinión de los “fósforos”.
El tío es un cachondo, tiene una
retranca de madre y señor mío y sobre todo le sabe sacar partido a lo que se ponga
por delante; como vea la mínima oportunidad se tira al cuello y con esa sorna
que le caracteriza le saca al oyente hasta el carnet de identidad y si encima
el tema toca, aunque sea de soslayo, lo escatológico entonces es que apaga y vámonos,
el menda disfruta como un guarro en un charco mientras atosiga al oyente con
preguntas cada vez más incisivas que, en la mayoría de los caso, acaban como el rosario
de la aurora entre carcajadas generalizadas. En otras cosas se puede estar o no
de acuerdo con él, pero en esto es un genio.
Por desgracia mi trabajo me
impide seguirlo y sólo los viernes tengo un poquito de tiempo para oír sus
comentarios y los de los oyentes, y los viernes precisamente la cosa no va de
risas sino de comida y siempre con un tema monográfico, arroces, setas,
hamburguesas, lo que buenamente se le ocurra y este viernes iba de latas, de
las maravillosas latas que hay en nuestro país: berberechos, bonito, callos,
fabadas, cola de toro, y un interminable sinfín de ellas.
Una señora llamó para contar que
ella le hacía a su marido un plato de alubias con navajas que estaba de tocarle
las palmas y que su marido no se creía que lo hacía con productos lateriles y
acto seguido contó como confeccionaba tal manjar. Como plato se me pusieron los oídos y nada más concluir la
buena señora con la explicación me dije. ¡tate, esto lo hago yo ya mismo!.
Y efectivamente lo acabo de hacer
y esta es la receta a mi manera como cantaba el gran Franky.
Y estas las alubias |
ALUBIAS CON NAVAJAS
Ingredientes:
Un bote de alubias ya cocidas
Una lata de navajas.
Unos mejillones cocidos al vapor (en la receta original no venía)
Media copita de manzanilla o un buen vino blanco (esto tampoco)
Una cebolla, ajo, sal, aceite de oliva y perejil.
Preparación:
Lo primero es cocer los
mejillones, yo los hago al vapor y los dejo muy muy poco tiempo, lo justo para
que se abran y tomen cuerpo. Los reservo, les quito las conchas y los guardo en un recipiente junto con un
poco del caldo de la cocción previamente colado.
Las alubias la sacamos del bote y
le damos un enjuague.
Las navajas las sacamos de la
lata y guardamos el líquido.
En un recipiente pongo el aceite
y pocho la cebolla muy picadita, cuando esté lista le añadimos las alubias
escurridas y damos unas vueltas. Añadimos el vasito de vino, dejamos que se
evapore el alcohol y ponemos el líquido de las navajas y un poco del caldo de
los mejillones, simplemente hasta cubrir someramente las alubias.
Dejamos que se mezclen los
sabores a fuego lento durante unos diez minutos y rectificamos de sal si hace
falta.
Mientras en una sartén hemos
puesto los ajos picados y le hemos dado un punto de color, añadimos los
mejillones y las navajas, ambos troceados,
y los hacemos como si fuesen gambas al ajillo. Cuando estén acabados añadimos
todo a las alubias.
Uhmmm! Feijoãos com lingueiros. Te los copiaré pero, ya puesta, más falsaria todavía, con una lata de mejillones al natural! La afición, desbocada! Un abrazo.
ResponderEliminarCon tantos exámenes y evaluaciones no ha habido tiempo de leer mis blogs favoritos con el tiempo y la dedicación que se merecen. ¡Platazo! Me encantan estas recetas.
ResponderEliminarAprovechamos para desearos una muy feliz y gastronómica navidad.