En la Sevilla de mis amores, en la calle Greco, está el Bar Rocío; es un barecito familiar, pulcro y limpio como una patena, con un servicio profesional, amable y cercano y una estupenda carta de tapas. En la barra el pater de familia. Miguel, ejerce de perfecto anfitrión, su hijo atiende las mesas de la terraza y su esposa señorea con mano esperta en los fogones. Al fondo de la barra tiene un amplio salón comedor donde se puede degustar una de las mejores cocinas caseras de la capital, con un catálogo de soberbios guisos.
Pero volvamos a las tapitas que es lo que me interesa; entre una amplia carta donde se mezclan las ofertas tradicionales con otras con un matiz mas novedoso, mi preferida es la carrillada de ibérico al Pedro Ximenez (o carrillera, que también así se dice ahora), mi mujer se decanta por las taleguillas rellenas de queso con mermelada e higo y ambos por el arroz imperial, y precisamente de esta tapa es de lo que vamos a hablar.
Según me he instruido el arroz imperial es una receta de origen centroamericano, cubano más concretamente. El caso es que después de ciertas pruebas y de ir cotejando receta por aquí, receta por aca; a esta receta le quito este ingrediente, en esta otra potencio este otro, etc, he llegado a cogerle el puntito, me he confeccionado mi propia receta, me sale pa chuparse los dedos y esta es la receta que ahora mismito voy a compartir con todos ustedes.
Arroz al gusto
2 mazas de pollo
4 dientes de ajos
3 cebollas medianas
1 pimiento rojo mediano
2 hojas de laurel
2 o 3 latas de atún en aceite de oliva
2 cucharadas soperas de puré de tomate
Mahonesa
1 pastilla de caldo de pollo
1 cucharada de café de comino
1 vaso de vino blanco
Sal
Paso1:
Cogemos dos mazas de pollo, le quitamos la piel y lo ponemos a hervir junto a 2 dientes de ajo, 1 cebolla, dos hojitas de laurel, sal y una pastilla de caldo de pollo. Cuando este tierno lo sacamos del agua, lo desmenuzamos y reservamos.
Colamos el caldo de la cocción y reservamos.
Este paso se puede hacer el día anterior y ya tenemos medio camino andado.
Paso 2:
Con los otros dos dientes de ajo, la otra cebolla y un pimiento rojo todo bien picadito realizamos un sofrito con el máximo cariño y dejando que se haga a fuego lento. Una vez bien pochado añadimos dos cucharadas de puré de tomate, una cuchara de café de comino, el arroz y cubrimos con el caldo del pollo que teníamos reservado. Rectificamos de sal y dejamos cocer durante 20 minutos (un primer hervor a fuego fuerte, luego a fuego medio) hasta que esté prácticamente hecho (Entre 18 y 20 minutos). Apartamos del fuego y dejamos reposar.
Paso 3:
En una sartén rehogamos media cebolla, cuando esté pochada añadimos el pollo desmenuzado y un vaso de vino blanco, lo dejamos hacer hasta que se evapore todo el líquido.
Último paso. Preparación:
En una bandeja para horno bien engrasada colocamos una primera capa de arroz que cubra generosamente todo el fondo, sobre ella otra capa del atún mezclado con mahonesa, una tercera de arroz, una cuarta con el pollo extendido y una última de nuevo de arroz.
Para los amantes del queso se remata con queso para fundir o bien una bechamel
Al horno para gratinar unos minutos y listo para comer.
La foto no hace justicia al plato, la he puesto para que se vean las distintas capas y sobre todo porque soy un manto echando fotos y no tenía otra a mano. Por otro lado podemos ver que aún no está gratinado, cuando sale del horno toda la parte superior muestra un fundido precioso.
Que la disfrutéis, pero si podéis os aconsejo que os paséis por el bar Rocío que la hace mucho mejor que yo.
Gracias por leerme
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Hola! Tiene una pinta estupenda y lo voy a hacer hoy mismo, pero tengo una pregunta: ¿las cantidades indicadas para cuántos comensales son?
ResponderEliminarSaludos y gracias por el blog.